martes, 17 de septiembre de 2013

Hablando con la oscuridad y su encanto.

Oscuros e irrepetibles  los momentos de tu triste e inequívoca mirada para este tu amante en secreto en este insípido viernes, que se lleva lo mejor de mi semana. Quizás mi última semana en lo más olvidado de tus pensamientos. 
Jane : Créeme que no estoy consciente del tiempo que ha pasado.
Gus: El Tiempo, siempre el tiempo. Nos tiene en sus manos y no nos damos cuenta.
Jane: ¿Acaso importa saber cuánto o cuándo? Siempre tendremos el silencio esperando por nosotros. Sólo es cuestión de escuchar y callar.
Gus: Pues sí yo callo porque quiero conocer el silencio. ¿Quién hablará? Todos nos encontramos en ese camino.
Jane: yo también estoy en tu camino por eso hablo sobre el silencio para que este se apodere de mi y me lleve consigo. (La voz se hace más intensa) El poder de mirar más allá de lo que tus ojos abiertos pueden alcanzar, cierralos y dime si no es acaso que en realidad puedes ver más allá de lo visible. ¡¡¡Dimelo!!.
Gus: yo ... Sólo veo una pared oscura inmensa en la que se reflejan mis temores. 
Jane: ¿Temes no poder ver?
Gus: Temo poder ver y no ser capaz de mirar.
Jane: sólo calla y deja que tus oídos escuchen la voz del silencio que grita para que su voz sea escuchada. 
Gus: sólo quiero escucharte a ti y morir mientras me miras a los ojos y me hablas del silencio que tanto me atormenta y que me aleja de recitarte mis sentimientos.
Jane: No entiendo.
Gus: Lo sé. Siempre te he tenido como primera opción a cambiar el rumbo de mis días, siempre has estado en cada una de mis decisiones. El silencio no me dará tu amor, el silencio no me hará feliz porque a tu lado lo soy, incluso cuando tratas de apartarte de mi. El tiempo y el silencio se llevan el poco valor que supongo tener. Porque mi amor no desea conocer a la inmensidad de el silencio y el tiempo que este tiene para dar. Mi amor te quiere a ti y a tus dulce manía de esconderte en mi corazón cada vez que te veo. Cierto los ojos y no puedo ver más allá de lo evidente porque te veo a ti dándole luz a la pared oscura. Te veo a ti, sólo a ti.

El silencio se impone mientras los dos se miran a los ojos, no dicen nada sólo se miran y tratan de comprender que está pasando.

Jane: yo he aprendido a quererte en todo este tiempo que nos hemos logrado conocer. Yo cierro los ojos y me veo en medio de algo blanco a veces algo oscuro pero siempre me veo queriendo llegar al camino que me lleve hacia mi interior.
Perdóname pero yo no puedo ofrecerte más que la amistad de siempre. 
Gus: entiendo. Sólo quise tener un "Si me quiere" al final de deshojar una Margarita.
Gus despierta y se encuentra en su cuarto a su costado hay una carta que contenía "Siento no haber podido corresponder a ese amor pero necesitas vivir y tratar de entender lo que podemos decir sin palabras." La oscuridad.